El Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) ha cerrado la primera fase de su concurso arquitectónico para la ampliación de sus instalaciones con 30 propuestas seleccionadas. La convocatoria ha atraído a 65 estudios y arquitectos individuales de 9 países, mostrando el interés internacional en este proyecto de gran envergadura.
Un jurado diverso para una elección rigurosa
El proceso de selección sigue avanzando. Un jurado compuesto por representantes de las administraciones clave —la Generalitat de Catalunya, el Ayuntamiento de Barcelona, y el Ministerio de Cultura—, junto con miembros del Colegio de Arquitectos de Cataluña (COAC) y el propio museo, evaluará las propuestas y seleccionará cinco finalistas. Estos proyectos avanzarán a una segunda fase, remunerada, antes de que se decida el ganador en la primavera de 2025.
Este proceso de selección, basado en la presentación anónima de las propuestas, garantiza una evaluación imparcial, enfocada exclusivamente en la calidad y la viabilidad del proyecto.
Una ampliación que honra el pasado y mira hacia el futuro
El MNAC, fundado en 1934 bajo la visión de Joaquim Folch i Torres, se convertirá en un museo de referencia internacional, fusionando su edificio actual con el histórico Pabellón Victoria Eugenia. Este espacio, obra del arquitecto Josep Puig i Cadafalch, será restaurado y conectado con el edificio principal en el Palau Nacional, permitiendo una experiencia museística fluida y conectada.
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Este proyecto supone no solo una rehabilitación arquitectónica de gran valor patrimonial, sino también una oportunidad para reorganizar y mejorar los espacios actuales. La integración de los dos edificios permitirá desplegar todas las misiones artísticas, patrimoniales y de servicio público que el MNAC desarrolla y ampliará su impacto en el ámbito cultural.
Un museo de dimensiones europeas al servicio de la ciudad
Esta ampliación no solo pretende aumentar la capacidad expositiva del MNAC, sino también reforzar su posición como gran museo europeo, adaptado a las demandas y expectativas de la sociedad actual. La reorganización de sus espacios, el mejoramiento de sus accesos y su conexión con el tejido urbano serán aspectos decisivos para consolidar su relevancia cultural. El proyecto busca también fortalecer el vínculo del museo con Barcelona, poniéndolo al servicio tanto de la ciudad como del país.
Un espacio para todos: arte, educación y participación social
El nuevo MNAC no se limitará a exhibir arte, sino que se transformará en un centro de aprendizaje, intercambio cultural y participación comunitaria. Los espacios adicionales permitirán al museo responder a las necesidades y demandas de diversos colectivos culturales y sociales, consolidando su rol como servicio público de referencia.
Con la ampliación, el MNAC podrá exhibir artistas de la segunda mitad del siglo XX y ofrecer, por primera vez, una colección exhaustiva de fotografía y de artes populares como el cómic y la ilustración. El museo busca también adaptar sus áreas de exposición a programas de gran escala y variedad, y potenciar su labor educativa, promoviendo la interacción entre el arte y la comunidad.
Un proyecto de alcance internacional
La expansión y revalorización del MNAC no solo colocarán a Barcelona en la vanguardia de los museos europeos, sino que también subrayarán el compromiso de la ciudad y el país con el arte y la cultura. La ciudad contará con un museo de dimensiones y calidad comparables a los grandes referentes europeos, consolidando a Barcelona como un destino imprescindible para los amantes del arte y la historia.
Este proyecto representa un paso audaz hacia el futuro del MNAC, reafirmando su misión de preservar y celebrar el patrimonio artístico y cultural, a la vez que abre sus puertas a nuevas expresiones artísticas y a la comunidad en general.
