Barcelona da un paso adelante en su compromiso con la igualdad de género al presentar el informe ‘El género en cifras 2024’, un análisis exhaustivo que pone de manifiesto las brechas y desigualdades que enfrentan las mujeres en distintos aspectos de la vida cotidiana. Este estudio, elaborado cada cinco años, se consolida como una herramienta clave para diseñar políticas públicas más equitativas y eficaces.
El informe, que incluye datos recogidos por diversas fuentes oficiales y encuestas municipales, permite comprender las desigualdades estructurales desde una perspectiva de género. Con su diagnóstico detallado, no solo identifica problemas, sino que ofrece una base sólida para proponer soluciones en áreas críticas como empleo, salud, vivienda y participación ciudadana.
La desigualdad en cifras: una radiografía de la brecha de género
Uno de los hallazgos más destacados del informe es la persistencia de la feminización de la pobreza, un fenómeno que afecta de manera desproporcionada a las mujeres. Según los datos, el 40,5% de las mujeres en Barcelona se encuentran en riesgo de pobreza si se considera únicamente su ingreso individual, en comparación con el 29,4% de los hombres. Además, las mujeres enfrentan una brecha salarial del 17,1% y una mayor precariedad laboral, con un 26,4% de contratos a tiempo parcial frente al 12,9% de los hombres.
Esta precariedad económica tiene consecuencias directas en otros ámbitos, como la vivienda. Más mujeres viven de alquiler (43,1%) que hombres (37,7%), lo que las hace más vulnerables a fenómenos como la pobreza energética. En 2021, el 24,1% de las mujeres reportó dificultades para mantener una temperatura adecuada en sus hogares, frente al 21,1% de los hombres.
La carga invisible: las mujeres y los cuidados
El informe también revela que las mujeres asumen una parte desproporcionada de las tareas de cuidado y domésticas, lo que genera una «pobreza de tiempo» que limita sus oportunidades. El 59% de las mujeres dedica más de dos horas diarias a estas tareas, en comparación con el 35% de los hombres. Además, muchas de las profesionales del cuidado son mujeres extranjeras en situación administrativa irregular, lo que agrava su vulnerabilidad laboral.
Violencia de género: un problema persistente
Otro dato alarmante es el aumento de la violencia machista en la ciudad. En 2022, el 90% de las víctimas de agresiones sexuales fueron mujeres, y las denuncias por violencia de género crecieron significativamente, alcanzando las 3.285. Además, más del 51% de las adolescentes de 17 y 18 años reportaron haber sufrido acoso sexual, una cifra que evidencia la urgencia de intervenir en esta problemática desde edades tempranas.
Salud y bienestar: una perspectiva desigual
En el ámbito de la salud, las mujeres no solo enfrentan mayores índices de trastornos mentales (31,3% frente al 21,6% de los hombres), sino que también consumen psicofármacos en mayor proporción (23% frente al 12,8%). Esta diferencia se acentúa en las clases sociales más bajas, donde las condiciones socioeconómicas agravan los problemas de salud mental.
Además, la esperanza de vida más alta de las mujeres no siempre se traduce en una mejor calidad de vida. Un 24% de las mujeres calificó su salud como regular o mala, frente al 18,3% de los hombres, y esta percepción negativa aumenta con la edad y en contextos socioeconómicos desfavorables.
Educación, cultura y participación: avances y retos
A pesar de que las mujeres tienen mayor presencia en niveles educativos superiores, el informe destaca una segregación de género en los estudios no obligatorios. Áreas como la mecánica y la tecnología siguen estando dominadas por hombres, mientras que los sectores relacionados con los cuidados y las artes están feminizados.
Barcelona avanza en la prevención de violencias machistas con una iniciativa transformadora
En el ámbito cultural, las mujeres participan más en actividades locales y en el uso de equipamientos de proximidad, como bibliotecas y centros cívicos. Sin embargo, la dirección de instituciones culturales de alto prestigio sigue siendo mayoritariamente masculina, evidenciando la falta de paridad en posiciones de liderazgo.
Movilidad y espacio público: diferencias de género
El informe también aborda la movilidad y la percepción de seguridad en la ciudad. Las mujeres utilizan más el transporte público y caminan más que los hombres, quienes optan en mayor medida por vehículos privados. Sin embargo, las mujeres reportan una mayor sensación de inseguridad en el espacio público, especialmente en el transporte.
Un compromiso para el cambio
La publicación de ‘El género en cifras 2024’ refuerza el compromiso del Ayuntamiento de Barcelona con la igualdad de género. Iniciativas como la creación de un observatorio de género y las Conversaciones Feministas buscan fomentar el diálogo y la innovación en las políticas públicas. Según la regidora de Feminismos y Memoria Democrática, “este informe no solo es un diagnóstico, sino una hoja de ruta para alcanzar una igualdad real y efectiva.”
Con un enfoque basado en datos y un diagnóstico interseccional, este informe no solo visibiliza las desigualdades de género, sino que también ofrece herramientas para superarlas. En un contexto global donde la igualdad sigue siendo un desafío, Barcelona se posiciona como una ciudad comprometida con el cambio.