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Una plaza para todos: nueva área de juegos inclusiva en la Vila de Gràcia

La plaça de la Revolució de la Vila de Gràcia ha estrenado una renovada área de juegos infantiles que transforma por completo la experiencia de los más pequeños. Este proyecto no solo moderniza la zona, sino que también se convierte en un referente en accesibilidad e inclusión.

Una plaza para todos nueva área de juegos inclusiva en la Vila de Gràcia

Más espacio, más diversión

El diseño de la nueva área elimina las tradicionales vallas que delimitaban los juegos, creando un espacio abierto y conectado con el resto de la plaza. Ahora, los niños pueden disfrutar de un sistema innovador de «islas» con diferentes tamaños y formas, que invitan a explorar y jugar sin restricciones.

Entre las islas destacan propuestas como la Illa Miracel y el calidoscopio Miraendins, que ofrecen juegos ópticos, o la Illa Palpa el món, donde las texturas y los materiales despiertan los sentidos. También hay opciones para balancearse, girar, trepar y deslizarse, con actividades pensadas para todas las edades y niveles de habilidad.

Inclusión en cada rincón

Uno de los puntos fuertes del proyecto es su enfoque en la accesibilidad. Todas las actividades están diseñadas para que niños con discapacidades visuales, intelectuales o motoras puedan participar plenamente. El pavimento juega un papel crucial en esta misión, con colores diferenciados para destacar los elementos dinámicos, reduciendo riesgos y facilitando la orientación.

Además, el diseño sigue los criterios del Pla del joc a l’espai públic, que busca integrar el juego en cualquier parte de la plaza, borrando los límites tradicionales. Esto significa que la diversión ya no se concentra en un único punto, sino que se expande por toda la plaza.

Gràcia apuesta por el juego inclusivo

Con esta renovación, el distrito de Gràcia suma su cuarta área de juegos totalmente accesible, junto a las ubicadas en la Plaça de Joanic, el Parc de la Creueta del Coll y el Passeig de Sant Joan. Esto refleja un claro compromiso por ofrecer espacios donde todos los niños, independientemente de sus capacidades, puedan disfrutar y desarrollarse.

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Los 277.371 euros invertidos en esta intervención no solo han transformado el paisaje urbano, sino que también han sentado un precedente en la forma de entender el juego y la inclusión en Barcelona.

Jugar es un derecho, y aquí se celebra

La nueva área de juegos de la plaça de la Revolució no es solo un espacio para correr y saltar. Es una declaración de intenciones, un recordatorio de que cada niño merece un lugar donde crecer, aprender y, sobre todo, divertirse. Barcelona sigue avanzando hacia una ciudad más inclusiva, y esta plaza es un claro ejemplo de ello.