La época navideña se acerca y con ella surge la oportunidad de sorprender a nuestros seres queridos con regalos únicos y memorables. Este año, la Diputación de Barcelona, a través de su marca turística “Barcelona es mucho más”, da un giro innovador y propone una selección de experiencias de turismo de proximidad en las comarcas de Barcelona. Estas experiencias no solo brindan momentos inolvidables, sino que también apoyan el tejido local y promueven la sostenibilidad.
Escapadas rurales y aventuras al aire libre
Las escapadas rurales son una opción fenomenal para familias que buscan desconectar sin alejarse demasiado de la ciudad. Cabanes Dosrius ofrece la posibilidad de dormir entre las copas de los árboles, combinando la experiencia con comidas y masajes. Por otro lado, La Masoveria Els Plans de Cornet en Bages presenta paquetes que incluyen alojamiento y visitas guiadas a la naturaleza. Para los más aventureros, seguir el curso del río Anoia a pie o en bicicleta es una opción vibrante y adaptable, complementada con paradas en encantadores pueblos y actividades al aire libre.
Romance y relajación para parejas
Para aquellos que buscan un regalo especial para parejas, las masías spa y los hoteles boutique son la elección ideal. Masia Spa Can Pascol combina estancias con masajes de viterapia. En contraste, el Hotel Calipolis en Sitges permite disfrutar de una escapada frente al mar. Además, el Hotel Vila Arenys ofrece experiencias gastronómicas como cenas degustación o cócteles de autor. Una opción náutica más exclusiva es disfrutar de un paseo privado en barco, explorando la costa de Barcelona con una copa de cava en mano.
Adrenalina y emociones fuertes
Para quienes tienen la adrenalina en sus venas, las proezas aéreas y la velocidad ofrecen experiencias inigualables. Un viaje en globo es una manera mágica de apreciar vistas espectaculares de Montserrat. Los amantes del motor encontrarán emocionante pilotar quads o 4×4 en circuitos diseñados para el máximo disfrute. Y para los más intrépidos, los experimentos aéreos como saltos en paracaídas o volar una avioneta proporcionan emociones que no se olvidan fácilmente.
Relax en aguas termales
El relax también puede ser un regalo perfecto. En Caldes de Montbui, los visitantes pueden disfrutar de baños termales y un recorrido cultural por el Museo Thermalia. Para una experiencia aún más original, las sesiones de baño de bosque o mindfulness entre viñedos ofrecen tranquilidad y rejuvenecimiento en el corazón de la naturaleza.
Delicias gastronómicas para los foodies
Los aficionados a la gastronomía apreciarán las experiencias culinarias en productores locales. Desde aprender a elaborar quesos y cervezas hasta disfrutar de rutas gastronómicas en Lluçanès o Garraf. Un almuerzo en un restaurante con estrella Michelin, como el restaurante L’Ó en Món Sant Benet, es un regalo que promete paladares satisfechos.
Enoturismo en tierras barcelonesas
Barcelona es un paraíso para los amantes del vino. Las excursiones incluyen visitas a bodegas, catas de vinos, e incluso paseos a caballo entre viñedos. En Penedès, Bages y Alella se pueden encontrar rutas únicas que combinan visitas culturales y degustaciones. Estos regalos no solo deleitan el paladar, sino que conectan a los visitantes con la rica tradición vinícola de la región.
Cultura y arquitectura para mentes curiosas
Para los entendidos en arte y arquitectura, las visitas guiadas a obras maestras de Gaudí son un verdadero deleite. Explorar la Colonia Güell o el Palau Güell a través de visitas guiadas proporciona una perspectiva enriquecida de la obra del famoso arquitecto. Además, museos como el MEV ofrecen experiencias inmersivas que fusionan arte y tecnología, haciendo del descubrimiento cultural un regalo que estimula tanto la mente como el alma.
Fomentando un turismo sostenible y responsable
Todas estas experiencias forman parte del Círculo de Turismo de la Diputación de Barcelona, una iniciativa que une a empresarios y destinos para impulsar un desarrollo económico sostenible acorde a los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Regalar turismo de proximidad no solo es una forma de enriquecer nuestra cultura y vivencias, sino también una manera de apoyar el crecimiento económico local y sostenible.
Un regalo que conecta a las personas con su entorno, nutre la economía local y ofrece momentos únicos junto a los seres queridos: eso es regalar experiencias de turismo local esta Navidad.
